miércoles, 5 de abril de 2017

Nuevo

Ahora vivo en un barrio nuevo. En una casa nueva, donde las puertas, de color amarillo, las paredes, también amarillas, y hasta las ventanas y su luz coloreada, casi amarilla, son nuevas. Incluso la calle, que se derrama del otro lado del cristal, tan amarillo, parece nueva cuando desde esta ventana, muy pronto aún por la mañana, te veo pasar calle abajo. Veloz, elástica, con tu sombrero amarillo nuevo.